viernes, 26 de noviembre de 2010

Magic The Gathering

Creo que a estas alturas nadie se sorprenderá si digo que estoy viciado al Magic The Gathering. En la imagen una de las últimas adquisiciones de una de las expansiones que más me están gustando: Rise Of The Eldrazi.

¿Se echa alguien unas partidas?

martes, 23 de noviembre de 2010

Jardines impresionistas

Aquí dejo un par de imágenes correspondientes a 2 cuadros que estuvimos viendo el otro día. Se trata de la exposición Jardines impresionistas del museo Thyssen - Fundación Caja Madrid.

Además de estas obras se pueden admirar otras de gusto exquisito como por ejemplo el cuadro 'Flores de Loto' de Chares Courney Curran.

Os dejo algo de info.



Jardines impresionistas presenta un vasto recorrido por el tema del jardín en la pintura desde mediados del siglo XIX hasta comienzos del siglo XX. Se trata de una exposición organizada por el Museo Thyssen-Bornemisza y la Fundación Caja Madrid en colaboración con la National Gallery of Scotland, Edimburgo, y comisariada por Clare Willsdon, profesora de la Universidad de Glasgow, Michael Clarke, director de la National Gallery of Scotland y Guillermo Solana, director artístico del Museo Thyssen-Bornemisza.

A mediados del siglo XIX, la introducción y el cruce de cientos de plantas y especies de flores exóticas procedentes de Asia, África y América, así como la apertura al público de los parques reales, estimularon en Francia y otros países europeos un gran movimiento hortícola. Diseñar y cultivar jardines se convirtió en una pasión a la que no fueron ajenos los pintores impresionistas, como Monet y Caillebotte.

La exposición comienza en las salas del Museo Thyssen-Bornemisza con una sección dedicada a los precursores del jardín impresionista. La pintura de flores del romanticismo (representada por Delacroix) se yuxtapone aquí a los floreros de Bazille o Renoir. Frente a estos «jardines de interior», los pintores de la escuela de Barbizon se abrieron al aire libre y exploraron el jardín como paisaje. Artistas como Millet, Corot y Daubigny serían precedentes inmediatos de la pintura impresionista francesa.

La aproximación de los impresionistas al tema del jardín está marcada por tres oposiciones: entre la ciudad y el campo, el parque público y el jardín privado, lo decorativo y lo productivo.

El jardín aparece como un punto de encuentro entre lo urbano y lo rural, puede ser una isla de naturaleza en medio del asfalto o bien un fragmento de orden civil en mitad del campo. Así como los pintores de Barbizon habían representado jardines campestres, Manet y los impresionistas descubrieron en los parques parisienses los atractivos combinados de la vida moderna y el aire libre.

La segunda polaridad se establece entre los grandes espacios verdes de carácter público (como el Parc Monceau, el Bois de Boulogne o el Trocadero) y los pequeños jardines privados, frecuentemente vinculados a la casa del artista. Monet y Pissarro, Morisot y Sargent nos revelan los parques de París y otras ciudades como escenarios de una intensa vida social donde cohabitan y disfrutan las diversas clases. En el jardín privado, por otra parte, los mismos pintores plasman el ámbito de la intimidad y lo personal: la conversación, la lectura, el juego o el reposo.

La tercera oposición se establece entre el jardín decorativo (escenario del ocio) y el jardín productivo (espacio de trabajo). Las dos últimas salas de la exposición en el Museo Thyssen-Bornemisza se centran en la dedicación de Pissarro al tema del huerto, con especial énfasis en la figura del campesino trabajando (en consonancia con las convicciones políticas del artista). Algunos artistas que recibieron las lecciones de Pissarro o experimentaron su influencia, como Cézanne, Gauguin o Van Gogh, están también representados aquí.

En la Fundación Caja Madrid, el recorrido continúa, en la gran sala central, con la evolución del tema del jardín en la obra tardía de los impresionistas franceses (con lienzos de Monet, Pissarro o Caillebotte) y en la nueva generación de pintores postimpresionistas (como Van Gogh, Klimt, Vuillard, Bonnard o Toulouse-Lautrec).

En el espacio de la planta superior, la atención se desplaza hacia la pintura naturalista europea y americana del cambio de siglo. Todo un elenco de artistas alemanes, escandinavos, británicos o estadounidenses se dejaron influir por la búsqueda de la luz y el aire libre, características del impresionismo. Una tendencia paralela se observa en la pintura española de la época, representada por nombres como Sorolla, Regoyos, Pla, Meifrèn o Anglada-Camarasa, reunidos aquí en un espacio aparte.

La última sala presenta la metamorfosis del jardín en la transición del postimpresionismo a las primeras vanguardias del si glo XX, como el fauvismo, el cubismo y el expresionismo alemán, con obras de Cézanne, Munch, Nolde, Dufy, Braque, Malévich y Ernst.

viernes, 12 de noviembre de 2010

Carro de la compra + Barco de Ávila

Este es el segundo año que hacemos la iniciativa del carro de la compra.
Durante 4/5 semanas tienes que recopilar cupones del periódico, cumplimentar una cartilla, pagar unos 6€ por gasto de gestión... y lo que al final te llevas es un carro lleno de primeras marcas.

Aquí en la imagen se puede ver el resultado de la colecta en el supermercado.


Y hace unas semanas tuvimos la alegría de poder hacer un mini-viaje a Barco de Ávila, ese pequeño pueblo cercano a la sierra de Gredos que atesora mil y un escondites por donde perderse. Las imágenes que dejo a continuación son algunos buenos ejemplos de lo bonito que es aquello.

En primer lugar no puede faltar esa buena pitanza. Sobran comentarios.


Estas son las vistas desde el hotel en el que siempre nos alojamos. Se puede ver una panorámica fantástica de todo el pueblo. Falta la iglesia, situada un poco más a la derecha de la imagen.


Aquí una imagen de la ternera de Ávila, famosa por el color negruzco. Doy fe que servida en el plato es un auténtico manjar... y que decir del queso...hmmmmm. Cuando volvimos no pude resistir la tentación de traerme un buen pedazo de queso de 'El Pastor'. Rico rico.


Esta es una imagen de la calle principal del pueblo. Tradicional por los 4 costados y lleno de tiendas en donde comprar todo tipo de productos típicos de la zona.


En los paseos que se pueden dar se encuentra este, que transcurre paralelo a la orilla del rio.


Y se puede acercar al rio hasta casi caerse. Se nota que el Tormes lleva mucha agua porque en verano se puede llegar andando hasta casi la cascada que se ve al fondo.


Y con paciencia se pueden obtener imágenes como esta.


Toda una recomendación por si nunca has estado. Más que recomendable.